Las bodas siempre son motivo de alegría y celebración, y acompañar el regalo con una tarjeta hecha a mano añade un toque especial y muy personal. Esta tarjeta de gran tamaño —aproximadamente 18×22 cm— ha sido creada con un aire romántico y vintage, ideal para escribir una bonita dedicatoria o incluir los nombres de las personas que participan en el regalo.
El diseño combina cartulina blanca, papel kraft y papeles decorativos de alto gramaje, junto con una delicada ilustración recortada de la colección sobre bodas de Dayka Trade. Como podéis ver en la imagen, los detalles son los que marcan la diferencia: pequeñas perlas decorativas, troquelados en papel kraft con la silueta de un angelito, varios corazones y las iniciales de los novios, que completan la composición de una manera equilibrada y elegante.
El encanto del cardmaking
El término cardmaking hace referencia al arte de crear tarjetas hechas a mano, donde se diseñan y decoran desde la base hasta los elementos finales. No se trata solo de un pasatiempo creativo, sino de una forma de transmitir sentimientos a través del papel. En el cardmaking se combinan técnicas y materiales muy diversos: troquelado, entintado, embossing, sellado o collage, entre otros.
Para realizar una tarjeta de este tipo se necesitan algunas herramientas básicas que facilitan el trabajo y mejoran el acabado final. Una guillotina o cizalla ayuda a cortar el papel con precisión, mientras que la regla, el punzón y la tabla de plegado permiten marcar dobleces limpios. También son muy útiles los sellos, tintas, pegamentos, plantillas o troqueles para personalizar cada diseño. Y como base, nada mejor que una cartulina resistente, de al menos 180 gramos, para garantizar la firmeza de la tarjeta.
El cardmaking, en definitiva, es una forma de expresión artística. Cada tarjeta cuenta una historia y refleja la personalidad de quien la crea. En este caso, los tonos neutros, los troqueles y la ilustración central evocan la elegancia de las bodas clásicas y el encanto de lo hecho con cariño.

Una tarjeta romántica y con estilo propio
En la fotografía se puede ver con detalle cómo cada elemento ha sido cuidadosamente colocado para lograr una composición armoniosa. Los colores suaves y el estilo vintage aportan una sensación de serenidad, mientras que los pequeños adornos, como las perlas o los troquelados, añaden el toque romántico que caracteriza a todas las creaciones de este tipo.
Esta tarjeta de felicitación no solo es un complemento perfecto para acompañar el regalo, sino también un recuerdo que los novios podrán conservar con cariño. Porque las cosas hechas a mano tienen alma, y cada detalle cuenta una historia.
¡Hasta pronto! Diana.








